16 DE FEBRERO DE 2013
RUTA LIÑARES DE BIDUL-A PONTE DE VILLABOL
A FONSAGRADA)
Distancia:18 km
Duración da ruta: 6 horas
Dificultad: Media
Descripción da ruta:
Se trata de una de las rutas más variadas y espectaculares que se pueden realizar en el cercano municipio de A Fonsagrada, en la que tendremos la oportunidad de transitar por antiguos senderos contemplando aldeas abandonadas, magníficos bosques con vegetación mediterránea, antiguas construcciones tradicionales como cortines, ouriceiras, bodegas y herrerías, y por último contemplar contemplar los hermosos meandros que forma la cola del embalse de Grandas de Salime.
Partiendo de la aldea de Liñares de Bidul, pasaremos por las aldeas abandonadas de O Ludeiro y A Fornaza, con restos de antiguas bodegas y de hornos de fundición de hierro, para dirigirnos hacia la cola del embalse de Grandas de Salime, en un entorno paisajístico muy hermoso y espectacular por los meandros que forma el río en esta zona.
Desde aquí, caminaremos cerca del río empleando el antiguo “Camino de la República”, hecho a mano en los años 30 y 40 con el fin de unir A Fonsagrada con San Antolín de Ibias, hasta llegar a los restos de la antigua Ferrería de Vilar de Cuiña, a partir de la cual nos internaremos en el desfiladero que forma el río Lama por un sendero espectacular que acaba en el Puente de Villabol.
Para realizar esta ruta primero tenemos que acceder desde A Fonsagrada hasta llegar a la aldea de Liñares de Vidul, situada en un lugar privilegiado con grandes vistas de las montañas de alrededor, incluídos Os Ancares. La aldea está situada a una altura de unos 800 metros de altitud, sobre la cola del embalse de Grandas de Salime.
Desde aquí cogemos un camino que sale a la izquierda en dirección este, comezando a caminar primero por un buen camino entre monte bajo y con magníficas vistas de la sierra.
Al cabo de un rato nos desviamos y proseguimos por sendero que desciende con bastante pendiente y terreno irregular con numerosas piedras, que hace algo dificultosa la bajada.
Después de un trecho caminando, entramos en una zona espectacular muy abrupta donde veremos, perdida entre la vegetación, la aldea abandonada de O Ludeiro, en un lugar fascinante, aislado y escarpado, que se encuentra practicamente tapada por los grandes bosques que tapizan esta zona. En la aldea hay restos de bodegas xa que en esta zona se hacía vino.
Atravesamos los restos de la aldea y nos introducimos en una gran zona de bosque autóctono, espectacular, con todo tipo de árboles destacando centenarios castaños, pasando por delante de numerosos cortines, antiguas construcciones tradicionales donde se situaban las colmenas para protegerlas de los osos y otros animales. También veremos ouriceiras o corripas, construcciones circulares de piedra donde se almacenaban las castañas un tiempo para que maduraran.
El sendero continúa por varios soutos de castaños, siguiendo el arroyo del Navallo, hasta llegar a una única casa muy aislada en el valle del arroyo de Outeiro, donde parece increíble que alguien aún pueda vivir. La casa es la única que sigue activa de una antigua aldea que había en la zona, de la cual sólo quedan ruinas al otro lado del río. Al lado de la casa se halla una fuente.
A partir de aquí proseguimos por un bello sendero divisando los impresionanes bosques que tapizan este valle, caminando a media ladera. Al poco rato comenzamos lentamente a descender divisando los hermosos meandros de la cola del embalse de Grandas de Salime hasta llegar a la carretera.
A partir de aquí tenemos que transitar un rato por la carretera hasta llegar a un alto desde el cual veremos la aldea de Fornaza, en un lugar espectacular con una hermosa capilla, y donde además hay restos de antiguos hornos de fundición férrea. En este punto descendemos hasta Fornaza y cogemos un camino que baja bruscamente hasta el embalse hasta enlazar con los restos la Casa de los Ingenieros, construida como casa de dirección de las obras en la época que se quería realizar el embalse del Gran Suarna y que nunca fue habitada. Algo más abajo se hallan los restos de La Fábrica, lugar donde se fundía el mineral hasta el año 1875 de las minas circundants y del que aún se conserva hoy la chimenea
A partir de este punto enlazamos con el antiguo “Camino de la República”, hecho a mano en los años 30 y 40 para unir A Fonsagrada y San Antolín de Ibias, y que en esta zona discurre pegado al embalse de Grandas de Salime con un paisaje fluvial de gran belleza.
Pasamos por la bifurcación de la cola del embalse de Grandas en el río Suarna y el río Navia y proseguimos bordeando el primero.
Finalmente, pegada al río Lamas, llegaremos a la Ferrería de Vilar de Cuiña, importante factoría que tuvo actividad hasta finales del siglo XIX, en un hermoso lugar al lado del río Suarna.
Después de descansar en este bonito lugar, continuamos el itinerario hasta introducirnos en un impresionante sendero tallado en las pendientes del cañón que forma el río Lamas, y que ofrece ante nuestros ojos un paisaje espectacular.
Por último llegamos por buen camino hasta Ponte de Villabol, cerca de la playa fluvial “Pena do Inferno”, donde acaba nuestra caminata por la fantástica comarca de A Fonsagrada.
LA FERRERÍA DE VILAR DE CUIÑA
Fue construida por la “Compañía de la Vega” de Ribadeo durante los años 1793-1794, configurándose como una de las más grandes del noroeste peninsular, manteniendo su actividad hasta finales del siglo pasado.
Se trataba de una herrería dotada no solo del horno para la reducción del mineral sino también de varios mazos. El mineral se obtenía de las minas que la propia empresa explotaba en Llan de Pereira, Grandas de Salime y de la zona de Riodeporcos, ademas del que le llevaban a vender a los particulares.
La herrería comenzaría su decadencia con la Guerra de la Independencia, de la que no lograría ya recuperarse, quedando ya abandonada con la Revolución Industrial.
RUTA LIÑARES DE BIDUL-A PONTE DE VILLABOL
A FONSAGRADA)
Distancia:18 km
Duración da ruta: 6 horas
Dificultad: Media
Descripción da ruta:
Se trata de una de las rutas más variadas y espectaculares que se pueden realizar en el cercano municipio de A Fonsagrada, en la que tendremos la oportunidad de transitar por antiguos senderos contemplando aldeas abandonadas, magníficos bosques con vegetación mediterránea, antiguas construcciones tradicionales como cortines, ouriceiras, bodegas y herrerías, y por último contemplar contemplar los hermosos meandros que forma la cola del embalse de Grandas de Salime.
Partiendo de la aldea de Liñares de Bidul, pasaremos por las aldeas abandonadas de O Ludeiro y A Fornaza, con restos de antiguas bodegas y de hornos de fundición de hierro, para dirigirnos hacia la cola del embalse de Grandas de Salime, en un entorno paisajístico muy hermoso y espectacular por los meandros que forma el río en esta zona.
Desde aquí, caminaremos cerca del río empleando el antiguo “Camino de la República”, hecho a mano en los años 30 y 40 con el fin de unir A Fonsagrada con San Antolín de Ibias, hasta llegar a los restos de la antigua Ferrería de Vilar de Cuiña, a partir de la cual nos internaremos en el desfiladero que forma el río Lama por un sendero espectacular que acaba en el Puente de Villabol.
Para realizar esta ruta primero tenemos que acceder desde A Fonsagrada hasta llegar a la aldea de Liñares de Vidul, situada en un lugar privilegiado con grandes vistas de las montañas de alrededor, incluídos Os Ancares. La aldea está situada a una altura de unos 800 metros de altitud, sobre la cola del embalse de Grandas de Salime.
Desde aquí cogemos un camino que sale a la izquierda en dirección este, comezando a caminar primero por un buen camino entre monte bajo y con magníficas vistas de la sierra.
Al cabo de un rato nos desviamos y proseguimos por sendero que desciende con bastante pendiente y terreno irregular con numerosas piedras, que hace algo dificultosa la bajada.
Después de un trecho caminando, entramos en una zona espectacular muy abrupta donde veremos, perdida entre la vegetación, la aldea abandonada de O Ludeiro, en un lugar fascinante, aislado y escarpado, que se encuentra practicamente tapada por los grandes bosques que tapizan esta zona. En la aldea hay restos de bodegas xa que en esta zona se hacía vino.
Atravesamos los restos de la aldea y nos introducimos en una gran zona de bosque autóctono, espectacular, con todo tipo de árboles destacando centenarios castaños, pasando por delante de numerosos cortines, antiguas construcciones tradicionales donde se situaban las colmenas para protegerlas de los osos y otros animales. También veremos ouriceiras o corripas, construcciones circulares de piedra donde se almacenaban las castañas un tiempo para que maduraran.
El sendero continúa por varios soutos de castaños, siguiendo el arroyo del Navallo, hasta llegar a una única casa muy aislada en el valle del arroyo de Outeiro, donde parece increíble que alguien aún pueda vivir. La casa es la única que sigue activa de una antigua aldea que había en la zona, de la cual sólo quedan ruinas al otro lado del río. Al lado de la casa se halla una fuente.
A partir de aquí proseguimos por un bello sendero divisando los impresionanes bosques que tapizan este valle, caminando a media ladera. Al poco rato comenzamos lentamente a descender divisando los hermosos meandros de la cola del embalse de Grandas de Salime hasta llegar a la carretera.
A partir de aquí tenemos que transitar un rato por la carretera hasta llegar a un alto desde el cual veremos la aldea de Fornaza, en un lugar espectacular con una hermosa capilla, y donde además hay restos de antiguos hornos de fundición férrea. En este punto descendemos hasta Fornaza y cogemos un camino que baja bruscamente hasta el embalse hasta enlazar con los restos la Casa de los Ingenieros, construida como casa de dirección de las obras en la época que se quería realizar el embalse del Gran Suarna y que nunca fue habitada. Algo más abajo se hallan los restos de La Fábrica, lugar donde se fundía el mineral hasta el año 1875 de las minas circundants y del que aún se conserva hoy la chimenea
A partir de este punto enlazamos con el antiguo “Camino de la República”, hecho a mano en los años 30 y 40 para unir A Fonsagrada y San Antolín de Ibias, y que en esta zona discurre pegado al embalse de Grandas de Salime con un paisaje fluvial de gran belleza.
Pasamos por la bifurcación de la cola del embalse de Grandas en el río Suarna y el río Navia y proseguimos bordeando el primero.
Finalmente, pegada al río Lamas, llegaremos a la Ferrería de Vilar de Cuiña, importante factoría que tuvo actividad hasta finales del siglo XIX, en un hermoso lugar al lado del río Suarna.
Después de descansar en este bonito lugar, continuamos el itinerario hasta introducirnos en un impresionante sendero tallado en las pendientes del cañón que forma el río Lamas, y que ofrece ante nuestros ojos un paisaje espectacular.
Por último llegamos por buen camino hasta Ponte de Villabol, cerca de la playa fluvial “Pena do Inferno”, donde acaba nuestra caminata por la fantástica comarca de A Fonsagrada.
LA FERRERÍA DE VILAR DE CUIÑA
Fue construida por la “Compañía de la Vega” de Ribadeo durante los años 1793-1794, configurándose como una de las más grandes del noroeste peninsular, manteniendo su actividad hasta finales del siglo pasado.
Se trataba de una herrería dotada no solo del horno para la reducción del mineral sino también de varios mazos. El mineral se obtenía de las minas que la propia empresa explotaba en Llan de Pereira, Grandas de Salime y de la zona de Riodeporcos, ademas del que le llevaban a vender a los particulares.
La herrería comenzaría su decadencia con la Guerra de la Independencia, de la que no lograría ya recuperarse, quedando ya abandonada con la Revolución Industrial.
2 comentarios:
Nunca llovió que no escampase. Según la orientación religiosa de cada uno, recemos o crucemos los dedos y toquemos madera. Ojalá nos acompañe un precioso cielo azul. Nos lo merecemos.
Parece quedespues del largo túnel húmedo y oscuro se ve la luz. Al parecer disfrutaremos de un día despejado y luminoso, aunque frio por la estación en que estamos(solsticio de invierno). Es un alivio no tener que cargar con los paraguas y vislumbrar el posible disfrute del paisaje. Y quién sabe, puede que hasta podamos tener algún rato en manga corta.
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