26 MARZO 2011
RUTA DE LAS ALGAS (ORTIGUEIRA)
(PROYECTO SENDAS COSTERAS)
Distancia:15,5 km
Duración de la ruta: 5 horas
Dificultad: Fácil
Descripción de la ruta:
La ruta de las algas es una de las rutas costeras más hermosas y atractivas existentes en la Comunidad Autónoma de Galicia, que cuenta con numerosos e importantes valores naturales y paisajísticos que hacen que este itinerario sea auténticamente inolvidable para cualquier caminante, permitiendo descubrir los grandes atractivos que atesora el municipio de Ortigueira.
Esta ruta es un compendio de itinerarios que discurren por todo el borde litoral de Ortigueira, por el llamado "Camino de la Costa", que son las siguientes:
Ruta de la intermareal de Ladrido (no se incluye en la ruta por su escaso interés)
Ruta de los marineros de Espasante
Ruta de los acantilados de Céltigos
Ruta de la Pena Furada (Céltigos)
Ruta de las algas (Loiba)
El punto de partida de esta bella ruta es el pueblo de Espasante, muy tranquilo y alejado de las masificaciones turísticas de otras zonas.
Enseguida alcanzamos la hermosa playa de la Concha, muy amplia y de arena fina, desde la cual podemos observar enfrente y a lo lejos el pueblo de Cariño e incluso Cabo Ortegal, con sus tres agujas y su impresionante faro. Recorremos toda la playa siguiendo el atractivo paseo marítimo y nos encaminamos a la lonja, llegando a la cala de Santa Cristina, muy escondida y que pasa totalmente desapercibida.
Desde aquí subimos hasta una atalaya donde se haya, totalmente oculto, el fascinante yacimiento de Punta dos Prados, que atesora los restos de un pequeño poblado fortificado construido entre los siglos IV y I a.C., famoso por tener el monumento con forno mejor conservado de Galicia. Los distintos autores coinciden en la identificación de este yacimiento como balneario público sin mencionar el carácter ritual o funerario que se le atribuye a otras construcciones de este tipo. Esta construcción resulta excepcional en la arquitectura exhumada, dado que su planta semicircular la diferencia de todas las que se conocen en Galicia –cuadrangulares- y Portugal –rectangulares.
Una vez visitado el yacimiento, , ascendemos la ladera por un sendero hasta alcanzar la Garita da Vela, construcción de vigilancia del siglo XVIII, desde la cual contemplamos inmejorables vistas de la costa Ártabra con Cariño, Cabo Ortegal, la ría de Ortigueira y Ladrido, el pueblo de Espasante con su playa, y hacia el otro lado la línea de costa que vamos a recorrer.
Bajamos por carretera hasta el pueblo para acceder a la hermosa playa de San Antón, de arena muy fina, que atravesaremos en toda su longitud. La playa nos ofrece vistas con acantilados, peñas y rocas junto a un mar generalmente enbravecido.
Al final de la playa subimos por un sendero algo dificultoso que trepa por encima del monte, cruzamos y ya podemos acceder a la playa de Eirón, practicamente virgen y muy bella. Su acceso es algo difícil con ayuda de una cuerda por la dificultad y mal estado del sendero.
De nuevo atravesaremos la playa de Eirón, disfrutando de cada momento por estas playas casi vírgenes, hasta llegar a otra playa, la de Bimbieiro o de Mazorgán.
Desde aquí, siguiendo la línea costera, llegamos a una zona con prados desde la cual veremos a la izquierda la bonita playa de Ribeira dos Ourizos, pequeña, rocosa e inaccesible.
Algo más adelante tendremos unas vistas espectaculares y difíciles de olvidar de una de las playas vírgenes más grandes del municipio de Ortigueira: la de Ribeira Grande o Sarridal, preciosa y a salvo del turismo masivo como otras de esta zona costera que son practicamente inaccesibles o con precarios accesos.
Después de disfrutar de las vistas, seguimos hasta la aldea de Paredes, desde donde nos introducimos en el interior por caminos que discurren cerca de bosques de eucaliptos y pinares.
Pasamos cerca del lugar de Rubido y volvemos a acercarnos a la costa, pasando por delante del difícil acceso a la playa de Sarridal.
Un poco más adelante, llegamos a un punto donde nos desviamos hasta el mirador de Pena Furada, impresionante roca que emerge del mar con dos grandes oquedades y forma de doble arco, formada por la erosión del mar y viento, y que constituye un marco incomparable de toda esta línea de costa.
Siguiendo el camino, salimos a una bifurcación desde donde nos encaminamos a la playa de Ribeira do Carro, llamada así porque se accedía a ella en carro para ir buscar algas, especialmente abundantes en esta playa.
Desde aquí, hacia la derecha, se contemplan las dos siguientes playas: la playa de los Castros y la playa de Fábrega, ambas con difíciles accesos.
Volvemos sobre nuestros pasos y continuamos ruta hasta el mirador de Cadaval, desde el cual tenemos unas amplias vistas de todos los acantilados en esta zona, en los cuales el viento y el mar han ocasionado formas caprichosas.
Seguimos caminando y disfrutando de las vistas y acantilados de la parroquia de Loiba, por lugares protegidos dentro de la Red Natura hasta llegar a la parroquia de Picón. Primero llegamos al mirador do Coitelo, espectacular y algo más adelante, podremos contemplar el fascinante embarcadero de Picón, en un lugar inaudito en la falda mismo de un gran acantilado y casi sin acceso.
Un poco más adelante llegamos a la hermosa playa de Picón, con buen acceso, situada en la aldea del mismo nombre.
Atravesamos la aldea y comenzamos el último tramo del recorrido, aún más bello que los anteriores si cabe, que nos dirige a la punta Vilardeira. Ahora ascendemos por estrechos senderos que bordean los acantilados, a veces en medio de pequeños bosques de pinos hasta llegar a la playa de Lousido, virgen e inaccesible.
Finalmente, caminando cerca de los acantilados, alcanzamos a ver la hermosa playa de Esteiro, ya en el municipio de Mañón. En este punto las vistas son incomparables, digno remate de una excursión inolvidable atravesando toda la línea de costa de Ortigueira. Llegamos a las pasarelas de la playa de Esteiro y nos dirigimos al aparcamiento de la misma, junto al campo de fútbol, finalizando esta fantástica ruta.
RUTA DE LAS ALGAS (ORTIGUEIRA)
(PROYECTO SENDAS COSTERAS)
Distancia:15,5 km
Duración de la ruta: 5 horas
Dificultad: Fácil
Descripción de la ruta:
La ruta de las algas es una de las rutas costeras más hermosas y atractivas existentes en la Comunidad Autónoma de Galicia, que cuenta con numerosos e importantes valores naturales y paisajísticos que hacen que este itinerario sea auténticamente inolvidable para cualquier caminante, permitiendo descubrir los grandes atractivos que atesora el municipio de Ortigueira.
Esta ruta es un compendio de itinerarios que discurren por todo el borde litoral de Ortigueira, por el llamado "Camino de la Costa", que son las siguientes:
Ruta de la intermareal de Ladrido (no se incluye en la ruta por su escaso interés)
Ruta de los marineros de Espasante
Ruta de los acantilados de Céltigos
Ruta de la Pena Furada (Céltigos)
Ruta de las algas (Loiba)
El punto de partida de esta bella ruta es el pueblo de Espasante, muy tranquilo y alejado de las masificaciones turísticas de otras zonas.
Enseguida alcanzamos la hermosa playa de la Concha, muy amplia y de arena fina, desde la cual podemos observar enfrente y a lo lejos el pueblo de Cariño e incluso Cabo Ortegal, con sus tres agujas y su impresionante faro. Recorremos toda la playa siguiendo el atractivo paseo marítimo y nos encaminamos a la lonja, llegando a la cala de Santa Cristina, muy escondida y que pasa totalmente desapercibida.
Desde aquí subimos hasta una atalaya donde se haya, totalmente oculto, el fascinante yacimiento de Punta dos Prados, que atesora los restos de un pequeño poblado fortificado construido entre los siglos IV y I a.C., famoso por tener el monumento con forno mejor conservado de Galicia. Los distintos autores coinciden en la identificación de este yacimiento como balneario público sin mencionar el carácter ritual o funerario que se le atribuye a otras construcciones de este tipo. Esta construcción resulta excepcional en la arquitectura exhumada, dado que su planta semicircular la diferencia de todas las que se conocen en Galicia –cuadrangulares- y Portugal –rectangulares.
Una vez visitado el yacimiento, , ascendemos la ladera por un sendero hasta alcanzar la Garita da Vela, construcción de vigilancia del siglo XVIII, desde la cual contemplamos inmejorables vistas de la costa Ártabra con Cariño, Cabo Ortegal, la ría de Ortigueira y Ladrido, el pueblo de Espasante con su playa, y hacia el otro lado la línea de costa que vamos a recorrer.
Bajamos por carretera hasta el pueblo para acceder a la hermosa playa de San Antón, de arena muy fina, que atravesaremos en toda su longitud. La playa nos ofrece vistas con acantilados, peñas y rocas junto a un mar generalmente enbravecido.
Al final de la playa subimos por un sendero algo dificultoso que trepa por encima del monte, cruzamos y ya podemos acceder a la playa de Eirón, practicamente virgen y muy bella. Su acceso es algo difícil con ayuda de una cuerda por la dificultad y mal estado del sendero.
De nuevo atravesaremos la playa de Eirón, disfrutando de cada momento por estas playas casi vírgenes, hasta llegar a otra playa, la de Bimbieiro o de Mazorgán.
Desde aquí, siguiendo la línea costera, llegamos a una zona con prados desde la cual veremos a la izquierda la bonita playa de Ribeira dos Ourizos, pequeña, rocosa e inaccesible.
Algo más adelante tendremos unas vistas espectaculares y difíciles de olvidar de una de las playas vírgenes más grandes del municipio de Ortigueira: la de Ribeira Grande o Sarridal, preciosa y a salvo del turismo masivo como otras de esta zona costera que son practicamente inaccesibles o con precarios accesos.
Después de disfrutar de las vistas, seguimos hasta la aldea de Paredes, desde donde nos introducimos en el interior por caminos que discurren cerca de bosques de eucaliptos y pinares.
Pasamos cerca del lugar de Rubido y volvemos a acercarnos a la costa, pasando por delante del difícil acceso a la playa de Sarridal.
Un poco más adelante, llegamos a un punto donde nos desviamos hasta el mirador de Pena Furada, impresionante roca que emerge del mar con dos grandes oquedades y forma de doble arco, formada por la erosión del mar y viento, y que constituye un marco incomparable de toda esta línea de costa.
Siguiendo el camino, salimos a una bifurcación desde donde nos encaminamos a la playa de Ribeira do Carro, llamada así porque se accedía a ella en carro para ir buscar algas, especialmente abundantes en esta playa.
Desde aquí, hacia la derecha, se contemplan las dos siguientes playas: la playa de los Castros y la playa de Fábrega, ambas con difíciles accesos.
Volvemos sobre nuestros pasos y continuamos ruta hasta el mirador de Cadaval, desde el cual tenemos unas amplias vistas de todos los acantilados en esta zona, en los cuales el viento y el mar han ocasionado formas caprichosas.
Seguimos caminando y disfrutando de las vistas y acantilados de la parroquia de Loiba, por lugares protegidos dentro de la Red Natura hasta llegar a la parroquia de Picón. Primero llegamos al mirador do Coitelo, espectacular y algo más adelante, podremos contemplar el fascinante embarcadero de Picón, en un lugar inaudito en la falda mismo de un gran acantilado y casi sin acceso.
Un poco más adelante llegamos a la hermosa playa de Picón, con buen acceso, situada en la aldea del mismo nombre.
Atravesamos la aldea y comenzamos el último tramo del recorrido, aún más bello que los anteriores si cabe, que nos dirige a la punta Vilardeira. Ahora ascendemos por estrechos senderos que bordean los acantilados, a veces en medio de pequeños bosques de pinos hasta llegar a la playa de Lousido, virgen e inaccesible.
Finalmente, caminando cerca de los acantilados, alcanzamos a ver la hermosa playa de Esteiro, ya en el municipio de Mañón. En este punto las vistas son incomparables, digno remate de una excursión inolvidable atravesando toda la línea de costa de Ortigueira. Llegamos a las pasarelas de la playa de Esteiro y nos dirigimos al aparcamiento de la misma, junto al campo de fútbol, finalizando esta fantástica ruta.
1 comentario:
A entrenarse para a vindeira ruta.
Saúdiños agarimosos.
Marta
Publicar un comentario